El Austral de
Valdivia, Viernes 19 de noviembre de 2004
Cayeron dos
cisnes en patio de una casa
En la comisaría Oscar Cristi
Gallo permanecieron estos dos cisnes que cayeron en el patio de una casa.
Con pena, tristeza y
asombro, los vecinos de la población Pablo Neruda constataron que algo sucede con los
cisnes. Dos de estas aves acuáticas se desplomaron, la energía se les acabó y cayeron
muy debilitados sobre el patio de una casa.
"Me da mucha pena que
estas aves se estén cayendo por la contaminación" dijo Gloria Pérez, quien al
llegar a su casa se encontró con los cisnes en su domicilio. "Los niños vieron
cuando cayeron y llamaron a carabineros, quienes vinieron a rescatarlos. Junto a estos
cisnes, igual volaban unas gaviotas, que también se veían débiles", afirmó.
Los dos cisnes fueron llevados
por carabineros hasta la subcomisaría Oscar Cristi Gallo y posteriormente, el Servicio
Agrícola y Ganadero, Sag, fue a buscar estas especies que serían derivadas al
laboratorio que la institución posee en Osorno.
La situación que en estos
momentos afecta a los cisnes mantiene preocupada a la comunidad valdiviana. La primera
alerta se dio el 22 de octubre, cuando se organizó una visita inspectiva al Santuario de
la Naturaleza. Allí se constató el deceso y migración de estas especies
características del humedal.
Según registros del Sag, en un
año normal se contabilizaban alrededor de 10 cisnes muertos en el santuario, pero este
año, en pocos meses, ya se han registrado 75.
Pero no son los únicos
afectados. También se ha constatado la disminución de las taguas y para algunos
especialistas, como el ornitólogo Jorge Ruiz, todo el ecosistema está en peligro.
Respecto a las hipótesis que
se barajan en este momento, como la sobrepoblación, alguna enfermedad o contaminación,
Ruiz asegura que es la intervención humana la responsable del daño ecológico. Esto,
afirmó "no es algo natural", y sólo esto -a su juicio- podría explicar el
brusco cambio en el Santuario de la Naturaleza y, en especial, el efecto que existe en las
plantas acuáticas.
Una de éstas, el llamado
luchecillo, desapareció y a juicio de Ruiz, sería a causa de "algo que se
vertió". También resaltó que en estos momentos "sólo se está viendo la
punta del iceberg y el efecto en el ecosistema es mucho más grande, el efecto es mucho
más amplio".
Para organizaciones
ambientalistas, la situación coincide con la puesta en marcha de la planta de celulosa,
cuyos residuos industriales líquidos (Riles), son descargados en el santuario del río
Cruces.
Hasta el momento, la empresa no
se ha pronunciado sobre este tema y sólo ha publicado inserciones. En este ámbito
comunicacional, son asesorados por la consultora de Tironi y Asociados.